Hans Andersen Brendekilde (Danés 1857-1942 ) Alguien armó un jardín donde era yermo. Un color negro atroz era un camino y cortó flores blancas y amarillas que limitaban pasos o senderos puse mis pies allí como al sereno. Caminé sobre el borde me asomé a las fronteras. Miré y miré y vi. Alguien posó una palma alguien un dedo. Y así miré las flores con la mano de alguien en mi espalda con la espalda de alguien en mi mano. Así escuché a Pessoa sonar caer a Prévert amar a Don Juanele Vera de un río alguien armó un jardín donde era yermo. Las flores se bifurcan se confunden concomitan continúan Son de tela de madera de hojas secas roca dura lava espesa huelen a mantel y a sábana a té verde recurren antiguas y en la piel los colores ...
Hay hilos que nos tejen. A cada uno, y a la malla de seres que conformamos. De esos cruces se va urdiendo este blog. Gracias por visitar.