HEXAGRAMA 6 (TEXTO DE HILARY BARRETT)

La riqueza de Hilary Barrett para el 6
Original post in English: https://www.onlineclarity.co.uk/answers/2015/12/13/contrasts-of-hexagram-6/

¿A dónde queremos llegar con la discusión?

Y si no fuera posible ganar la discusión ¿qué otra cosa podemos hacer?

                                                                                            (Las preguntas de Hilary para el 6)

Los contrastes del hexagrama 6

Al hexagrama 6 se lo llama El conflicto, El pleito, Disputar, Discutir. El nombre también significa apelar en la corte o exigir justicia. Se lo comprende mejor mediante contrastes y oposiciones, lo que es muy adecuado para el caso. Los autores del oráculo parecen haber pensado de manera similar. Su dictamen está formulado con una serie de contrastes:

«Discutir.
La sinceridad y la confianza, un bloqueo.
Mantenerse atento en el centro trae ventura.

Ir hasta el fin es peligroso.
Es propicio ver a la gran persona.
No es propicio cruzar el gran río».

Creo que comienza con una oposición entre «la sinceridad y la confianza», que es lo más importante en la comunicación dentro de una relación (más sobre esto en Language of Change) y «un bloqueo», que significa una obstrucción (un tapón en la salida que no deja pasar el agua). El contraste entre estos elementos señala algo que resulta frustrante en el hexagrama Discutir porque lo que se expresa no es la verdad. A veces, esto resulta bien evidente, se trata de una verdad que no se puede comunicar, de una relación en la que hay algunas cuestiones que quizá no se digan. A un nivel más profundo y más simple es la pura sensación de «aquí hay algo que no está bien». No solo la reacción emotiva del descontento, sino ese saber interior de que la situación podría ser mejor.

(Hay otra manera de usar la puntuación y obtener una traducción diferente: «La sinceridad y la confianza. En un bloqueo, mantenerse vigilante...» En cuyo caso el contraste entre «la sinceridad» y «bloqueo» es menos aparente).

Y los contrastes continúan: ventura frente a peligro; y «es propicio» frente a «no es propicio». ¿En qué se basan esas diferencias?

«Mantenerse atento en el centro trae ventura. Ir hasta el fin es peligroso».
El ideograma para «vigilante» es hermoso. Está compuesto por el corazón y yi, el cambio (el nombre del libro). Mantener en el centro un corazón-que-cambia trae ventura. Hay una diferencia entre detenerse a mitad de camino y seguir de largo hasta un final amargo (pero hay más que eso). La ventura llega cuando se está dispuesto y atento en el centro, se es consciente de los cambios y se es capaz de emprender el movimiento en cualquier dirección que se requiera. (En el centro uno está a la misma distancia de todos los puntos en la periferia, todas las posibilidades se encuentran igualmente a la mano).

El Tanzhuan (El comentario para la decisión) dice que es peligroso ir hasta el final porque «el pleito no permite que se alcance la realización». Esta es una cuestión central del hexagrama: Discutir no es la manera en que se realiza algo, sino una manera de decir algo: «esto no fluye, no encaja... probemos otra cosa».

«Es propicio ver a la gran persona. No es propicio cruzar el gran río».
¿En qué consiste este contraste entre ver a la gran persona y cruzar el gran río?

La gran persona, en Yi, se distingue porque puede ver más. (De nuevo, veamos la entrada en Language of Change.) Los ancianos, los guías y hasta los adivinos pueden ver ambos lados de la disputa y todas las posibilidades alternativas. Puede ser que Einstein haya dicho (o no) algo parecido a esto: «No se puede resolver un problema en el mismo plano en el que fue creado». Ver a la gran persona, cuando estamos en la temporada del hexagrama Discutir, quiere decir pasar a otro nivel de conciencia.

A menudo, cuando conversamos sobre «ver a la gran persona» con algún cliente, le sugiero consultar con su sabio interior (por ejemplo, a través de un juego, haciendo el «ejercicio mental» de conversar con su yo de dentro de 10 años, ese que ha resuelto esta situación hace ya mucho tiempo). Con el hexagrama 6, en cambio, mi primera recomendación es que hable con otra persona. Porque es tremendamente difícil desconectarse de la polémica interna y distanciarse de ella lo suficiente como para poder alcanzar otras maneras de mirar el asunto. El hexagrama 6 es un tiempo de consejeros matrimoniales, asesores, abogados, árbitros, mediadores y amigos inteligentes, personas que no van a quedar atrapadas en la disputa... después de todo, Discutir se traduce como «apelar en la corte».

De modo que ver a la gran persona significa que hay que dar un paso atrás, buscar una visión panorámica. Ver más allá de nuestros propios objetivos. Cruzar el gran río, por otro lado, quiere decir embarcarnos en cuerpo y alma en alguna tarea, incluso la de ir a la guerra. Supone plantarse en una posición: «Así y de ningún otro modo, pase lo que pase».

El Tuanzhuan menciona sucintamente que cruzar el gran río aquí significa «entrar en el abismo». Quien cruza el río ha pasado por alto muchas cosas que necesitaba saber. Le faltan perspectiva y comprensión y, por ende, se ahoga.

Más contrastes aún...

El texto contrasta la sinceridad y la obstrucción, la centralidad y «el final amargo», una visión y perspectiva estrechas de miras. Los contrastes en la estructura con otros hexagramas amplían y agregan elementos a esta cuestión (nos permiten entender de lo que no se trata el hexagrama Discutir, así vemos de lo que sí se trata).

Hexagrama complementario: 36, El esplendor oculto, una apertura

Si cambiamos todas las líneas del hexagrama Discutir, obtenemos El esplendor oculto, su hexagrama complementario u opuesto. Se pueden ver las principales similitudes en la «forma» de estas dos situaciones: la verdad obstruida, un statu quo que no está bien. La diferencia está en cómo respondemos: en el hexagrama 36 ocultamos la luz; en el hexagrama 6 llevamos el pleito a la corte.

Las raíces del ideograma song, Discutir, nos dan una buena pauta de su significado: está compuesto por una boca que emite sonidos y gong, que significa tanto duque como «justo, neutral» y «público, abierto a todos». En el hexagrama 36 ocultamos nuestras opiniones, fingimos demencia, hacemos como si no supiéramos. En el hexagrama 6 queremos sacar el problema a la luz y resolverlo. Aquí no nos lo guardamos (ni lo ocultamos, como puede suceder en el 36). En el hexagrama Discutir el problema se dice, se lo pone de manifiesto.

El par inverso 5: La Espera y el avance

Si miramos el hexagrama Discutir desde una perspectiva inversa (es decir, si lo damos vuelta) aparece el 5, La espera. La Zagua, el Ala que se dedica a contrastar los pares de hexagramas, dice:

«La Espera significa sin avance. Discutir significa sin conexión».

El hexagrama 5 tiene que ver con servir, con aguardar y convocar hacia nosotros lo que nos hace falta, y lo hacemos prestando atención, con claridad de conciencia. La espera tiene sinceridad y confianza (no hay bloqueos aquí) y le resulta ventajoso cruzar el gran río, dar prueba de su compromiso. Creo que, si lo hacemos bien, Esperar es una manera de alinearnos con el dao. No como una manera de «avanzar», sino como una manera de conectar con nuestro entorno.

La palabra «conexión» aquí significa afinidad, intimidad, afecto —cosas que el hexagrama Discutir, con su «verdad bloqueada», no tiene—. Aunque quizás, así como La espera parece ser una manera de conectar, el hexagrama Discutir puede que sea una manera de avanzar. No de llegar ni de lograr nada, sino simplemente de ir hacia adelante. En Esperar quizá nos conectamos con el proceso de cambio, pero en el hexagrama Discutir empujamos con fuerza contra el statu quo.

La sombra, el fantasma: 59, Dispersar y la diferencia

Otro hexagrama opuesto más, el hexagrama «menos 6» en la secuencia (es decir, contando de atrás para adelante a partir del 64) es el 59, Dispersar. (Este es un descubrimiento de Stephen Karcher), este hexagrama es la sombra o el fantasma de Discutir: precisamente la manera equivocada de pensarlo.

Los hexagramas «sombra» son tramposos, pueden representar la única manera que nos parece sensato pensar una situación. Cuando existe un conflicto, ¿no sería natural y bueno buscar una corriente única que unifique todo lo que fluye en la situación y termine con las divisiones? De verdad, ¿no parece más lógico intentar diluir las diferencias que bloquean la corriente?

Bueno, no. En el hexagrama Discutir necesitamos las diferencias. Necesitamos poder decir «no, así no» para poder ir contra la corriente. Esto se expresa de manera mucho más clara en los trigramas, el agua que fluye hacia abajo en sentido contrario al del cielo:

«El cielo se reúne con la corriente: movimientos opuestos. 

Discutir.
El noble usa los asuntos para planear el comienzo».

En el hexagrama Discutir tenemos que distanciarnos de los sentimientos que se involucran (ver a la gran persona y planificar un sentido nuevo). En cambio, en La dispersión suele haber una corriente de emociones que fluyen libres y desinhibidas).

En la práctica, este movimiento contra la corriente puede hacer aparecer una gran variedad de emociones. Una posibilidad es la de esa furiosa indignación, como el Gong Gong que en su furia agita las aguas para golpear al cielo: esto no está bien, esto no es justo, esto no puede ser.

La secuencia del hexagrama 5 dice (quizá con sarcasmo), «Comida y bebida dan con seguridad motivo para el pleito». Eso puede apuntar a una lucha desesperada por los recursos, Discutir para poder satisfacer nuestras necesidades básicas. Pero dentro de La secuencia, también el hexagrama es parte de una historia sobre un recién nacido (obviamente ignorante y que necesita ser alimentado) y evoca la imagen de alguien que no piensa comer ese puré de espinacas, porque ya sabe cómo es ese sabor y ya sabe que no le gusta. El hexagrama Discutir comienza con «la sinceridad y la confianza» después de todo.

De modo que puede haber ira, un rechazo furioso o, con un poco más de compostura y madurez, (atento en el centro... ver a la gran persona...) puede que lo que haya sea simplemente una mayor conciencia de lo que algún guía llamaría «tolerancia». «Esto no es lo ideal, pero bueno, lo puedo soportar... y luego, otra vez...» hay ahí algo que me incomoda y que hay que cambiarlo. Uno hasta puede llegar a eso por curiosidad: «Estaría mejor si fuera diferente, ¿cómo podría ser diferente?»

El mensaje que se reitera a lo largo de todo el hexagrama 6 —desde el dictamen hasta (y especialmente) la línea 6— es que no existe ninguna cosa que se parezca a ganar (en una discusión) de manera definitiva. O, para mirar esta idea desde otro ángulo: cuando discutimos, cuando vemos y queremos que algo sea diferente, si lo que nos proponemos es ganar, estamos usando mal ese poder. Las discusiones no son para ganar; ganar no es lo bueno de una discusión.

Solo en la quinta línea hay una indicación de ventura sin ambigüedad

«Discutir: en la fuente, ventura».

Esa es la línea en la que Discutir se junta con el hexagrama 64, Aún no cruzando. Es esa manera de Discutir que tiene claro que nada es completo ni definitivo y que no es bueno tener apuro por cruzar el río. Por ende, esta manera de Discutir tiene un final abierto y es creativa y curiosa. «El noble usa los asuntos para planear el comienzo». (Este es uno de los tantos hexagramas en los que La imagen se parece al comentario de la quinta línea). Aquí no pretendemos obtener una «ganancia», sino preguntarnos ¿cómo encaro esto ahora?, ¿y ahora? Y ahora, ¿para dónde?

Más sobre el hexagrama 6 con las líneas aquí